¿Dónde están centrados tus pensamientos? ¿A qué actividades estás dedicando más tiempo? Tus acciones están enfocadas en una dirección o por el contrario ¿Estás actuando mediante “impulsos emocionales del momento”?
Si quieres ver crecer algo en tu vida, es necesario dedicarle atención y trabajo. Ahora la pregunta es ¿Qué deseas ver crecer, qué necesitas desarrollar en ti? ¿Qué habilidad te está pidiendo un plan efectivo de mejora? ¿En qué situación te gustaría ser más eficaz?
Sin reflexión honesta y sosegada contigo mismo, es difícil determinar el punto de partida. Por ello precisamente es necesario y de vital importancia revisar exhaustivamente nuestras áreas personales, laborales y de todo tipo y determinar si estamos satisfechos con los resultados que estamos obteniendo en cada una de ellas.
Ahí es donde comienza todo ese maravilloso proceso de ingeniería mecánica; clarificar, determinar, fijar, comprometerse, confiar, practicar, enlazar, enfocar, planificar, recordar, visualizar, vibrar, soñar y emocionarse por estar haciendo lo necesario y disfrutando de ello, sabiendo que tú has hecho la parte que te corresponde en ese compromiso contigo mismo.
¿Qué te aporta un Coach en este proceso?
- El compromiso constante contigo mismo para trabajar paso a paso con el fin último de hacer realidad lo que te has propuesto mejorar o cambiar.
- Te invita a salir de la inercia adquirida en poner excusas a toda iniciativa de cambio.
- Aprendes a mirar las dificultades que se te presentan y a superarlas con tus propios recursos.
Esto es tan sólo un pequeño apunte de lo que puede hacer en tu vida un Coach. Comenzar ahora, depende de ti.
Isabel González. Neuro-Coach
